Calabacín gratinado

En primer lugar vamos a cortar el calabacín y lo vamos a hacer en rodajas no muy gruesas. En nuestro caso lo hemos pelado pero eso es opcional (gran parte de los vitaminas y minerales están en la piel). Le añadimos sal y lo dejamos reposar unos minutos para que exude un poco el agua.

En una sartén/plancha ponemos una pizca de aceite de oliva y a fuego medio vamos añadiendo los calabacines hasta que estén hechos a la plancha.

Un vez estén hechos los sacamos y los ponemos en un recipiente apto para horno. Comenzamos a añadirles el resto de ingredientes: base de tomate frito, zanahoria rallada y queso para gratinar arriba. Cada uno puede adaptar los ingredientes a su gusto ya que casi todo combina bien en esta receta.

Lo metemos en el horno en modo gratinar durante 5-7 minutos aproximadamente, hasta que veamos que está dorado el queso. Ya tenemos listo nuestro rico calabacín. Lo podemos poner como aperitivo, como acompañante de otra comida o incluso como comida principal. ¡Buen provecho!