Berenjenas rellenas de carne

Este plato no encierra dificultad, lo que sí tenemos que disponer es de tiempo. En primer lugar lavamos nuestras berenjenas enteras, las secamos y las partiremos por la mitad a lo largo. Les hacemos unos cortes con la punta del cuchillo haciendo como una rejilla sin llegar a la piel. Salamos al gusto y echamos un poco de aceite por encima de las berenjenas. Las ponemos en una bandeja de horno durante unos 25 minutos a 180 grados.

Cuando vemos que la carne de la berenjena ya está tierna, las sacamos y dejamos atemperar.

Mientras en una sartén, ponemos cuatro o cinco cucharadas de aceite de oliva y pochamos la cebolla, los ajitos y el pimiento todo bien picadito. Lo haremos a fuego lento para que se pochen bien.

En cuanto las berenjenas dejen de quemar, sacamos la carne con una cucharita con cuidado de no romper la piel de las berenjenas.

Se nos habrán quedado como en la foto.

Ahora cortamos con unas tijeras la carne de las berenjenas para que se queden en trozos más pequeños y añadimos al sofrito de cebolla y pimiento. Removemos el conjunto y añadimos la carne. Salpimentamos al gusto y le rallamos un poquito de nuez moscada. Removemos muy bien para que la carne no se quede apelotonada y se vaya haciendo por todos sitios por igual.

Cuando tenemos la carne hecha, añadimos el vino, removemos y esperamos a que se evapore. Por último añadimos el tomate frito y mezclamos todo. Ya tenemos preparado el relleno.

Con una cuchara rellenamos generosamente las barquitas de berenjenas.

Las cubrimos todas con bechamel.

Ahora les echamos queso para gratinar a nuestro gusto. Las ponemos a gratinar y ya tenemos preparadas nuestras ricas berenjenas rellenas de carne.