Berenjenas con tomate y queso

En primer lugar lavamos bien nuestras berenjenas y las partimos en rodajas de 1 cm de grosor. Las salamos y las tenemos 15 minutos en un bol para que suelten amargor.

En una bandeja de horno, ponemos las rodajas de berenjena con unos cortecitos en la superficie sin llegar al fondo y un hilito de aceite por encima. Las metemos la horno durante 10 a 15 minutos a 180 ºC.

Mientras, pelamos y picamos a cuadraditos el tomate. El queso que hemos elegido en cuadraditos pequeños. Si es un queso que funde mejor. Añadimos una cucharada de aceite, una pizca de sal, una pizca de pimienta, un poco de perejil picado y tomillo al gusto. Si no nos gusta el tomillo, se puede cambiar por orégano. Removemos todo bien.

Cuando están las berenjenas un poquito asadas, sacamos y vamos colocando mezcla encima de cada rodaja. Por último echamos un poquito de queso rallado por encima de cada una y metemos al horno.

Las tendremos hasta que se funda el queso. Sacamos y a comer calentitas.